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¿Qué significa ser paciente? La palabra en nuestro texto traducido “paciente” es makrothumos. Literalmente significa “de un espíritu largo”. Las palabras “espíritu largo” nos dicen lo que es la paciencia. Una persona con un espíritu largo esperará. No va a saltar para una respuesta rápida, y no se enfadará si no consigue algo de inmediato. Ese tipo de persona tiene un espíritu corto. Él es impaciente.

La palabra griega significa “no perder el corazón, perseverar fiel y valientemente en las desgracias y los problemas; ser paciente al sufrir las ofensas y lesiones de otros; ser un sufrimiento prolongado, lento a la ira” (léxico griego del nuevo testamento de la KJV). La misma palabra se traduce “longanimidad” [paciencia] en el libro de Gálatas:

“el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza” (Gálatas 5:22, 23).

La paciencia es un fruto del Espíritu Santo. Un cristiano maduro y adulto es paciente. Puede esperar.

El amor cristiano es la mayor virtud. La Biblia dice, “Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, [Agape, amor cristiano] estos tres; pero el mayor de ellos es el amor” (I Corintios 13:13). La paciencia es parte de ese amor. La Biblia dice:

“El amor es sufrido [es paciente]” (I Corintios 13:4).

El amor cristiano tiene un espíritu largo. Lo espera. Sufre mucho. El amor cristiano es paciente. Esta noche quiero sacar tres puntos sobre la paciencia.

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I. En primer lugar, la cultura de hoy tiene poca paciencia.

En nuestra cultura, todo tiene que suceder inmediatamente. Si miras un programa de televisión o ves una película, sabes lo que esto significa. Por un tiempo, la historia no se ve bien. Las cosas se hacen mal, y luego peor. Parece que el tipo malo va a ganar. ¡Pero en uno o dos minutos al final todo cambia! El actor bueno gana, el malo pierde, y todo es genial. ¡Caray! ¡Se acabó en un instante! No hay necesidad de esperar. No hay necesidad de paciencia. Esos espectáculos te enseñan a tener un espíritu corto, a ser impaciente. Los científicos llaman esto una gratificación instantánea. Lo quieres, y lo quieres ahora, sin esperar y sin trabajo.

No es sólo en programas de televisión. La falta de paciencia es a través de nuestra cultura. La gente no quiere esperar. Quieren todo de inmediato. Muchos hombres jóvenes quieren que una niña tenga relaciones sexuales en la segunda o tercera cita, en lugar de esperar hasta el matrimonio como dice la Biblia. Quieren su placer y no esperan.

En el centro de la ciudad, la mayoría de los niños no quieren estudiar. Ellos no quieren pasar horas leyendo un libro para que puedan obtener buenas calificaciones, graduarse de la universidad, y obtener un trabajo de salario alto. Ellos quieren divertirse ahora, sin esperar. Así que van a pasar el rato con sus amigos, o jugar deportes, o quedarse en casa jugando en su computadora, jugando videojuegos, mirando pornografía, o malgastar el tiempo en las redes sociales.

No son sólo los niños. Es casi todo el mundo. La gente no quiere ahorrar su dinero para que puedan comprar algo más tarde. Quieren gastar dinero y quiere tenerlo todo ahora. Cada comercial que veas te dice que compres algo. Estos dicen que, si ustedes lo compran, serán feliz como la gente del comercial. Y no tienes que ahorrar tu dinero y esperar hasta que puedas pagar. No, usted puede tener gratificación instantánea. ¡Puedes gastar dinero que no tienes! Puedes comprar cosas con tu tarjeta de crédito. Pero no serás feliz. Te ahogaras en deudas mientras tu dinero sale por la puerta. Así es como es nuestra cultura – sin paciencia. Y esto me lleva al segundo punto.

II. En segundo lugar, la Biblia nos enseña tener paciencia.

Dios mismo es paciente. La Biblia lo llama “el Dios de la paciencia” (Romanos 15:5). La Biblia dice: “¡Jehová! fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad” (Éxodo 34:6). Me alegro de que Dios tenga un espíritu largo, o Él no me hubiera aguantado, o contigo.

Dios nos dice que tengamos paciencia con Él. Aún no estamos en el cielo. Jesús no ha llegado todavía. No lo vemos ahora. Pero la Biblia dice: “si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos” (Romanos 8:25). Ser paciente. Mira más allá de hoy. Ten un espíritu largo. Confía en Él. La Biblia dice: “fiel es el que prometió” (Hebreos 10:23).

Jesús nos dijo que fuéramos pacientes en oración. Él dijo: “la necesidad de orar siempre, y no desmayar” (Lucas 18:1). No te rindas. Ora con un espíritu largo – sigan orando hasta que llegue la respuesta.

Dios nos dice que tengamos paciencia en nuestra obra para Él. La Biblia dice: “No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos” (Gálatas 6:9). Sigan a Jesús en la iglesia local. En la temporada apropiada vamos a segar.

Sé paciente cuando no entiendas por qué te suceden cosas. Job perdió su dinero, sus hijos y su salud. No sabía que era el diablo quien lo atacó. No tenía ninguna esperanza. Él esperó pacientemente hasta que Dios lo libró. El final de la historia de Job fue maravilloso. Dios lo sanó y le devolvió su riqueza y diez hijos más. El apóstol Santiago dijo:

“He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo” (Santiago 5:11).

Dios tiene tierna misericordia. No te ha olvidado. Ten un espíritu largo y ser paciente.

Dios nos dice que tengamos paciencia bajo presión. Tener un espíritu largo cuando los problemas vienen. La Biblia dice:

“gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración” (Romanos 12:12).

Dios usa la tribulación – la palabra significa “presión” – para hacerte un mejor cristiano. La Biblia dice:

“Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado” (Romanos 5:3-5).

Si te mantienes firme bajo presión, te volverás paciente. Tendrás un espíritu largo. Ganarás experiencia y crecerás con esperanza. ¡Serás un cristiano fuerte y maduro! Los buenos cristianos son pacientes, porque Jesús dijo:

“Mas la que cayó en buena tierra, éstos son los que con corazón bueno y recto retienen la palabra oída, y dan fruto con perseverancia” (Lucas 8:15).

No te preocupes cuando veas que los hombres malvados parecen escapar con sus malas acciones por un tiempo. La Biblia dice,

“Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, por el hombre que hace maldades…Porque los malignos serán destruidos, pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra” (Salmos 37:7, 9).

No te rindas porque la gente te traicionó y te abandonó. Tienen un espíritu corto. Tomaron lo que pudieron conseguir y corrieron. Pero ten paciencia. Ten un espíritu largo. Dios sabe bien y mal. ¡El Juez de toda la tierra hará lo que es justo!

III. En tercer lugar, la aplicación a ustedes que está aquí.

Podría ir a través de una lista de cosas: “espera hasta que estés casado antes de tener sexo”. “Estudia duro y no pierdas tu tiempo”. “Ahorra tu dinero y no lo gastes antes de obtenerlo”. Esas cosas son verdaderas, pero no son la aplicación más importante esta noche.

Estamos vendiendo este edificio en el centro de Los Ángeles. Nos vamos a mudar a un nuevo edificio en otro lugar. ¡Vamos a empezar una nueva iglesia! Pero a medida de ir adelante, recuerden lo que Dios dijo acerca de la paciencia. Sea paciente y tenga un espíritu largo.

Recuerde que no vamos a mover este minuto, o incluso este mes. Tomará tiempo vender este edificio. Cuando lo compramos hace treinta años, tardó meses en obtener los préstamos para pagarlo. Luego tuvimos que reparar el edificio para fortalecerlo contra los terremotos que tenemos en California. Tomará tiempo para mudarse al otro edificio. Se tomará más tiempo para repararlo y hacerlo limpio y alumbrante. Tomará tiempo para establecer los programas y las reuniones de la nueva iglesia. Sí, tomará tiempo. Necesitas paciencia. Ten un espíritu largo. Pero si pasara. ¡Estoy deseando que llegue!

Primero, sea paciente en oración. Sigue orando por este edificio para vender a un buen precio. El diablo no quiere que tengamos éxito. Tratará de detenernos. La Biblia dice: “no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra…huestes espirituales de maldad en las regiones celestes” (Efesios 6:12). Jesús dijo que “la necesidad de orar siempre, y no desmayar”. Haz esa parte de tus oraciones diarias. No te rindas. Ten un espíritu largo. Oren por el edificio para vender a un buen precio – y oren hasta que llegue la respuesta. ¡Entonces puedes orar por el nuevo edificio!

Segundo, sea paciente en ayunar. En nuestra iglesia local ayunamos todos los viernes hasta las 7:00 PM. Si hay un problema médico, pregunte a tu doctor. Cuando sentimos hambre, oramos, especialmente para que el edificio sea vendido. No solo ayunes una o dos veces. No dejes de hacerlo cuando no es novedad para ti. Ten un espíritu largo sobre esto. Jesús dijo: “cuando ayunéis” (Mateo 6:16). El ayuno es parte de la fe cristiana. Haz que sea parte de la tuya y mantenla así.

Tercero, sea paciente en servicio y lealtad a la iglesia. La Biblia dice, “No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos” (Gálatas 6:9). No seas como la gente de espíritu corto que huye. No deje la iglesia sólo porque toma tiempo para mudarse. Manténgase firme y fiel mientras nos estamos preparando para mudarnos, mientras nos mudamos, y luego cuando empezamos de nuevo. Te alegrarás de haberlo hecho. ¡En su debido tiempo nos regocijaremos!

Finalmente, algunos de ustedes aquí esta noche no han confiado en Jesús. No tengas un espíritu corto sobre tu alma. Piensa seriamente. Piensa en el pecado en tu vida. Piensa en el pecado de tu corazón. Verás lo malo que es tu corazón si te detienes y piensas por un tiempo. Aunque murió y derramó su sangre en la Cruz para pagar por tu pecado y lavarla para siempre, todavía lo has rechazado. Pero Él te salvará esta noche si confías en Él. Si deseas hablar con nosotros acerca de confiar en Jesús, por favor venga y siéntese en las dos primeras filas. Amén.