Print Sermon

El propósito de este sitio de Internet es proporcionar manuscritos de sermones gratuitos y videos de sermones a pastores y misioneros en todo el mundo, especialmente en el Tercer Mundo, donde hay pocos, si es que hay, seminarios teológicos o escuelas Bíblicas.

Estos manuscritos de sermones y videos ahora van a casi 1,500,000 computadoras en más de 221 países todos los meses en www.sermonsfortheworld.com. Otros cientos miran los videos en YouTube, pero rápidamente dejan YouTube y vienen a nuestro sitio de Internet. Los manuscritos de sermones se dan en 46 idiomas a casi 120,000 computadoras cada mes. Los manuscritos de sermones no tienen derecho de autor, así que los predicadores pueden usarlos sin nuestro permiso. Por favor, oprime aquí para aprender cómo puedes hacer una donación mensual para ayudarnos en esta gran obra de predicar el Evangelio a todo el mundo.

Cuando le escribas a Dr. Hymers, siempre dile en qué país vives o él no te podrá contestar. El correo electrónico de Dr. Hymers es rlhymersjr@sbcglobal.net.




TUS DEVOCIÓNES DIARIAS

por Dr. Kreighton L. Chan

Un sermón predicado en el Tabernáculo Bautista de Los Ángeles
El Sábado en la Noche, 31 de Octubre, 2015

“María, la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra”
(Lucas 10:39).


Marta y María eran hermanas. Ambas eran Cristianas. Y ambas eran amigas cercanas del Señor Jesús. Jesús las visitaba en su casa a menudo y pasaba tiempo con ellas. Leemos que Marta estaba ocupada sirviendo a Jesús limpiando y cocinando. Estaba enfocada en su trabajo pero no estaba pensando en Jesús Mismo. Pero María estaba callada y descansando, sentada a los pies de Jesús y oyendo Sus palabras. ¿Cuál complació más a Jesús? En el pasaje la respuesta es bien clara. Jesús corrigiendo a Marta, dijo: “Sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada” (Lucas 10:42). Pensemos en las palabras de Jesús. Y por la gracia de Dios todos volvámonos más como María y menos como Marta.

Igual que Marta todos tenemos vidas ocupadas. Todos tenemos muchas responsabilidades. Algunas de ellas como nuestro trabajo y la escuela son muy importantes. Estas toman gran cantidad de nuestro tiempo. Otras cosas son menos importantes, pero toman nuestro tiempo también. Y también pasamos tiempo haciendo el trabajo de la iglesia en la evangelización y cuidando a las personas nuevas. Es bueno trabajar y hacer muchas cosas. Yo creo en eso. Pero si no tenemos cuidado, podemos pasar todo el día sin pensar en Jesús, o no pensar en Él mucho. Eso sería un gran error. Así que las palabras de Jesús a Marta también se nos aplican a nosotros. Una cosa es necesaria que hagamos todos los días – sentarnos a los pies de Jesús y escuchar Su Palabra. Y al igual que María, esto es algo que debemos optar hacer. Y Jesús le dijo a Marta que el tiempo que María pasó con Él no podía serle quitado. Esto significa que el tiempo que se pasa con Jesús es de valor eterno para nuestras almas. Así es de importante pasar tiempo con Jesús. Entonces, ¿cómo nos sentamos a los pies de Jesús hoy y escuchamos Sus palabras? Lo hacemos al dedicar tiempo en nuestro día a la Palabra de Dios y a la oración. Esta es nuestra devoción diaria con Jesús. Es la cosa necesaria que hagamos en el día.

I. Primero, ¿cómo tenemos devoción diaria con Jesús?

Nosotros tenemos devoción diaria con Jesús cuando apartamos tiempo para leer nuestra Biblia. La Biblia no es un libro ordinario. Es la Palabra de Dios. Y en Juan capitulo uno, leemos que Jesús es el Verbo de Dios. La Palabra de Dios, la Biblia, es la expresión de los pensamientos mismos de Dios Mismo dados a nosotros por medio de Jesús. Así que al leer la Biblia, Dios se revela Él Mismo a nosotros por medio de Jesús. Y cuando leemos la Biblia, estamos pasando tiempo con Jesús Mismo. Esto es necesario para nuestras almas. La Biblia dice:

“Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación” (I Pedro 2:2).

Como los bebés no pueden crecer sin leche, tampoco los Cristianos pueden crecer sin leer la Biblia. Es por eso que tenemos que leer la Biblia a diario. Dios sabe todas nuestras necesidades. Él sabe que nuestros cuerpos necesitan alimentos. Es por eso que Jesús nos enseñó a orar:

“El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy” (Mateo 6:11).

Pero nuestras almas también necesitan alimento espiritual para vivir. Así que Jesús dijo:

“No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios” (Mateo 4:4).

Vivimos espiritualmente de alimentarnos de la Palabra de Dios, la Biblia. El tiempo que pasamos con Jesús leyendo Su Palabra fortalecerá nuestras almas. Y la Biblia es especialmente poderosa en nuestras vidas si la memorizamos. Así que después de tu lectura Bíblica diaria, pasa uno o dos minutos repasando el verso que hay que memorizar.

Nosotros tenemos devoción diaria con Jesús cuando apartamos tiempo para orar. Cuando oramos, estamos pasando tiempo con Jesús. Esto se debe a que todas nuestras oraciones tienen que pasar por Jesús antes de alcanzar los oídos de Dios el Padre. El Apóstol Pablo escribió:

“Por medio de él [Jesús] los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre” (Efesios 2:18).

Por medio de Jesús nuestras oraciones tienen acceso a, o llegan a Dios. ¡Y por medio de la Sangre de Jesús podemos orar atrevidamente entrando a la presencia de Dios Mismo!

Así que comenzamos nuestras oraciones con Jesús cuando Él le entrega nuestras oraciones a Dios. Y también terminamos nuestras oraciones con Jesús cuando decimos en el nombre de Jesús, Amén. Jesús está involucrado en todas las partes de nuestras oraciones, de principio a fin. Así que al orar pasamos tiempo con Jesús Mismo.

Nosotros te damos una “hoja devocional” todas las semanas. En esta hoja hay una lectura Bíblica diaria. Si eres nuevo, solo lee la lectura del Nuevo Testamento todos los días. Después, cuando te hayas acostumbrado a leer la Biblia, podrás leer la porción del Antiguo Testamento también. La hoja devocional también te recuerda de orar al menos cinco minutos y de agradecerle a Dios por tu comida diaria. Ora por el pastor, ora por otros, ora por tus propias necesidades. Nuestra devoción diaria incluye la lectura Bíblica y la oración. Es la hora del día cuando pasamos tiempo solos con Jesús. Trata de hacerlo a la misma hora todos los días. No tiene que tomar mucho tiempo, pero la cosa importante es hacerlo. Ten devoción diaria estés perdido o salvo. Y el tiempo con Jesús durante tu devoción diaria te ayudará mucho.

Tenemos nuestro propio tiempo devocional con Jesús. El Apóstol Pablo le dijo a Timoteo:

“Ten cuidado de ti mismo” (I Timoteo 4:16).

Pablo advertía al joven pastor, Timoteo, que debía ponerle atención a su propia condición espiritual. Porque Pablo sabía que si Timoteo descuidaba su propio corazón, le serviría poco a Dios en su ministerio para otros. La solución para que Timoteo estuviera en un buen estado espiritual, y para todos nosotros, es pasar tiempo con Jesús todos los días. Jesús Mismo dijo:

“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer” (Juan 15:5).

¿Cómo le podemos ser más útiles a Dios en nuestro ministerio? O, ¿cómo podemos llevar mucho fruto espiritual en nuestra vida Cristiana? Jesús nos da la respuesta. Lo hacemos por seguir o permanecer con Jesús. Un verdadero Cristiano siempre permanece conectado a Jesús. Él nunca puede perder su salvación. Pero eso no es a lo que el Apóstol Juan se refería. Él está hablando de la cercanía de la comunión del Cristiano con Jesús. Mantenemos esta cercanía con Jesús a través de nuestras devociones diarias, nuestra lectura de la Biblia y orando diariamente. Esta es la forma en que pasamos tiempo con Jesús y mantenemos cercana comunión con Él. Así es como podemos tener fruto en nuestro ministerio.

Nuestro tiempo devocional personal con Jesús es íntimo y lo más precioso. Este es el tiempo en el cual meditamos en la Palabra de Dios y vemos lo que Dios quiere que hagamos y sepamos. Es aquí donde echamos nuestra ansiedad sobre Dios en la oración secreta. Este es el momento que yo oro por los jóvenes. Este es el tiempo que oro por el pastor para que dirija nuestra iglesia. Este es el tiempo en que yo oro por conversiones y avivamiento. Todos los Domingos yo recibo una copia de las tarjetas de petición de oración que el pastor y el Dr. Cagan reciben. Y este es el tiempo que yo oro por ellas. La mayoría de estas peticiones de oración son para la gente nueva. ¡Qué bendición saber que nuestros jóvenes y las personas mayores están pensando y orando por nuestras personas nuevas! No es de extrañar que Dios está trayendo muchas de las nuevas personas en respuesta a nuestras oraciones. Me paso el tiempo dando gracias a Dios por su bondad y Su respuesta a nuestras oraciones. Yo canto las canciones del cancionero, y medito sobre la belleza de Jesús. Termino diciendo el Padre Nuestro.

Nadie más entra en el tiempo más íntimo que pasamos con Dios y Jesús en la oración. Jesús dijo:

“Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público” (Mateo 6:6).

¡Oh, qué alivio hallamos para nuestras cargas cuando nos levantamos al haber estado de rodillas después de nuestro tiempo de oración secreta! Le hemos dado nuestros problemas a Dios. Y confiamos que Él se encargará de ellos. Dios nos recompensará en público con respuestas a nuestras oraciones secretas. ¡Oh, lo bendito de nuestra devoción con Jesús en la lectura Bíblica y la oración!

Tenemos nuestra devoción familiar con Jesús. Si el padre de la casa es Cristiano, es su responsabilidad guiar en las devociones de familia. Lo hace leyéndoles la Biblia diariamente y después guiando en oración. Timoteo, leyó la Biblia cuando era niño. Dios usó eso después para ayudarlo a confiar en Jesús. Tocante a él, el Apóstol dijo:

“Y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús” (II Timoteo 3:15).

El aprender la Biblia no salvó a Timoteo. Fue la fe en Jesús que lo salvó. Pero Dios usó su conocimiento de la Biblia para ser una ayuda para él más tarde teniendo fe en Jesús. Un padre no puede criar a sus hijos a convertirse en Cristianos. La salvación es la obra de Dios y solo obra Suya. Pero el padre puede guiar en las devociones familiares en la lectura de la Biblia y la oración. Puede asegurarse de que la familia pasa tiempo con Jesús regularmente. Esto le dará impresiones fuertes a los niños de la importancia de Jesús en sus vidas. Recordarán el momento de la devoción familiar, hasta cuando sean adultos.

Y entonces Jesús dijo:

“Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos” (Mateo 18:19-20).

Jesús le promete Su presencia y respuestas a “cualquiera cosa que pidieren” cuando dos o más oren juntos. Así que no necesitamos esperar a venir a la iglesia para tener la promesa de Jesús del poder en oraciones de grupo. Podemos tener este poder en oración con esposo y esposa, y en la familia durante las oraciones familiares.

Podemos cantar uno o dos de los himnos durante la devoción familiar, o yo puedo repasar un punto o dos de los sermones del pastor del Domingo anterior. Nosotros terminamos cuando yo digo la oración de cierre, seguida por el Padre Nuestro.

II. Segundo, ¿qué hará por nosotros nuestra devoción diaria con Jesús?

Ya he hablado de cuan importante nuestra devoción diaria es con Jesús. Pero hay muchas otras bendiciones también.

Nuestra devoción diaria nos ayudará a volvernos más como Jesús. Al pasar tiempo con Jesús en lectura Bíblica y oración Él se volverá el deseo de nuestro corazón. Querremos ser más como Él. Cuando estamos con una persona que amamos y respetamos, nos volvemos un poquito como esa persona. El Apóstol Pablo escribió:

“Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús” (Filipenses 2:5).

Al pasar tiempo con Jesús en tus devociones personales, tu mente y pensamientos se volverán más como Su mente y Sus pensamientos.

El Apóstol Pablo era probablemente más como Jesús que cualquier otro hombre que jamás haya vivido. Pero, no estaba satisfecho con cuan bien conocía a Jesús. Él no estaba satisfecho con lo que había hecho por Jesús. Él escribió:

“A fin de conocerle [Jesús], y el poder de su resurrección” (Filipenses 3:10).

¡Deseemos conocer a Jesús más y tener el poder de Su resurrección en tu ministerio! Esto se puede lograr pasando tiempo precioso con Jesús. ¡Anticipemos entonces nuestras devociones diarias con Él!

Nuestra devoción diaria con Jesús refrescará nuestra alma. Nunca debemos pensar que nuestro tiempo de devoción con Jesús es más trabajo en nuestro día ya ocupado. No, nuestro tiempo con Jesús refrescará nuestras almas. Recuerda a Marta que estaba sobrecargada con sus actividades tan ocupadas. Y compárala con María quien descansaba a los pies de Jesús y oía Su palabra. ¡Oh, que nos volvamos menos como Marta y más como María! Jesús dijo:

“Aprended de mí…y hallaréis descanso para vuestras almas” (Mateo 11:29).

Aprendamos de Jesús durante nuestro tiempo de devoción con Él. Y Él promete que hallaremos descanso para nuestras almas cansadas. Durante nuestras devociones con Jesús escapamos de los afanes de este mundo. Es en este tiempo que podemos poner nuestro afecto en las cosas de arriba, no en las cosas de la tierra (Colosenses 3:2).

Nuestra devoción diaria con Jesús nos ayudará a correr la carrera Cristiana La vida Cristiana se puede comparar a una carrera larga o maratón. Y hay altos y bajos. A veces se puede sentir difícil seguir adelante. ¿Cómo podremos continuar en esta carrera sin estar más cansados? El Apóstol Pablo nos da la respuesta. Él escribió:

“Corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe” (Hebreos 12:1, 2).

Al mirar hacia Jesús y pasar tiempo con Él en nuestras devociones diarias, podemos correr la carrera Cristiana y no rendirnos. No nos cansaremos porque Jesús nos fortalecerá. Hacemos mucho ministerio en nuestro evangelismo y cuidando a la gente nueva. Pero también nos podemos cansar si lo hacemos con nuestra propia fuerza. Igual que Marta podemos servir a Jesús pero no pensar mucho en Él. ¡Mientras trabajamos para Jesús, pensemos en Jesús! ¡Obtengamos nuestras fuerzas de Jesús! Asegurémonos de que pasamos tiempo con Jesús a diario en nuestras devociones con Él. ¡Y que Dios te bendiga al hacerlo!

Tú dices: “Estoy perdido. ¿Hay un mensaje para mí en lo que has dicho?” Te digo, “Definitivamente, sí”. Porque Jesús es la respuesta si estás perdido o salvo. Sentarte a los pies de Jesús y escuchar Su Palabra es la única cosa necesaria para ambos, los perdidos y los salvos. Tal vez tu mente está llena de pensamientos de cómo confiar en Jesús o la forma de creer en Jesús. Y te has cansado de todo eso. Eso no es lo que necesitas. Eso no te ayudará. La única cosa necesaria para ti es que resuelvas tus pensamientos, siéntate a los pies de Jesús y escucha Su Palabra. Jesús dijo:

“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar” (Mateo 11:28).

¿Estás cansado de llevar la carga de tu pecado? Entonces escucha las amables palabras del amoroso Salvador que te ofrece quitarte tu carga de pecado. Ven a Él. Confía en Él. Él te dará descanso para tu alma y limpiará todos tus pecados en Su Sangre. Amén.


Si este sermón te bendijo a Dr. Hymers le gustaría saber ti. CUANDO LE ESCRIBAS A DR. HYMERS DEBES DECIRLE DE QUE PAÍS LE ESTÁS ESCRIBIENDO O ÉL NO PODRÁ CONTESTAR TU CORREO. Si estos sermones te bendicen por favor envía un correo electrónico a Dr. Hymers y díselo pero siempre incluye de qué país estás escribiendo. El correo electrónico de Dr. Hymers es rlhymersjr@sbcglobal.net (oprime aquí). Puedes escribirle a Dr. Hymers en cualquier idioma, pero escribe en Inglés si es posible. Si deseas escribirle a Dr. Hymers por correo postal, su dirección es P.O. Box 15308, Los Angeles, CA 90015. Puedes llamarle por teléfono al (818) 352-0452.

(FIN DEL SERMÓN)
tú puedes leer los sermones de Dr. Hymers cada semana en el Internet
en www.sermonsfortheworld.com.
Oprime en “Sermones en Español”.

Estos manuscritos de sermones no tienen derechos de autor. Pueden ser usados
sin la autorización de Dr. Hymers. Sin embargo, todos los mensajes de video de
Dr. Hymers, y todos los otros sermones en video de nuestra iglesia, sí tienen
derechos de autor y solo pueden ser usados con autorización.