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¿PIENSA ROB BELL QUE
 DIOS SOLO TIENE UN ATRIBUTO?

por Dr. R. L. Hymers, Jr.

Un sermón predicado en el Tabernáculo Bautista de Los Ángeles
La Mañana del Día del Señor, 15 de Mayo, 2011

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán. Después que el padre de familia se haya levantado y cerrado la puerta, y estando fuera empecéis a llamar a la puerta, diciendo: Señor, Señor, ábrenos, él respondiendo os dirá: No sé de dónde sois. Entonces comenzaréis a decir: Delante de ti hemos comido y bebido, y en nuestras plazas enseñaste. Pero os dirá: Os digo que no sé de dónde sois; apartaos de mí todos vosotros, hacedores de maldad” (Lucas 13:24-27).


Rob Bell es un jóven pastor que ha escrito un libro en Inglés de gran venta llamado: El Amor Gana: Un Libro Sobre el Cielo, el Infierno, y el Destino de Cada Persona que ha Vivido [Love Wins: A Book About Heaven, Hell, and the Fate of Every Person who has Ever Lived] (HarperOne, 2011). Bell piensa que todos, incluyendo los que están en el Infierno, ultimadamente serán salvos.

La Revista en Inglés Time (2 de Mayo, 2011) aclamó a Bell como uno de las 100 “Personas Más Influyentes” que viven hoy en día. Si eso es verdad, ¡Que Dios se apiade de nosotros! El libro de Bell dice que Dios no está enojado con los impíos y, que aún después de haber muerto, los pecadores perdidos tendrán “otra oportunidad” para ser salvos. ¡Y él también se refiere a gente como Hitler! ¡Aún asesinos en serie, los que abusan de los niños, violadores y terroristas como Osama Bin Laden! Bell dijo: “El amor de Dios eventualmente va a derretir los corazones más duros...el infierno no es para siempre, y el amor, al final, va a ganar y todos van a ser reconciliados con Dios” (traducción de Love Wins, ibid., pp. 108, 109). El Dr. Albert Mohler, Jr., presidente del Seminario Teológico Sureño Bautista en Louisville, Kentucky, dijo que el libro de Bell es “teológicamente desastroso. Cualquiera de nosotros debe preocuparse cuando un asunto de importancia teológica se toca de una manera subversiva” (traducción de Time, Abril 25 del 2011, p. 40). Después de ver un video de Rob Bell dando un sermón, el pastor Anglicano Dr. Michael Youssef (Iglesia de Inglaterra) dijo: “Me da nausea...vi qué mal está este joven y cómo él, en su esfuerzo de hacerse famoso, empezó a turbar [a aquellos que le escucharon] – causando tanto mal a su alma y a la de ellos...Sentí que las preguntas de Bell eran muy similares a las de la serpiente en el Huerto del Edén: ‘¿Dios realmente dijo eso?’...Con El Amor Gana [Love Wins,] lo que Rob Bell hace es... revelarnos que él es un Universalista” (One News Now, citado en The Sword of the Lord, Abril 15 del 2011, p. 10).

Un “Universalista” es alguien que rechaza las palabras de la Escritura y dice que todos ultimadamente van a ser salvos del Infierno. Esta enseñanza no es nueva. Los Unitarios Universalistas han enseñado esto por décadas. Los liberales como Harry Emerson Fosdick enseñaron esto hace cien años. Lo que lo hace parecer nuevo es que Rob Bell dice ser Evangélico. Otro tal llamado Evangélico, el Dr. Richard Mouw, presidente del liberal Seminario Teológico Fuller (donde Bell sacó su maestría) llama a El Amor Gana [Love Wins] “Un gran libro” (traducción de Daily News Journal). He leído el libro de Bell dos veces. En verdad no es “un gran libro” en ningún sentido de la palabra. Es un libro simple, lleno de confusión juvenil con una mezcla de especulación vacía y torcimiento de la Escritura.

Eso nos trae a nuestro texto. Mientras nuestro Señor Jesucristo iba hacia Jerusalén, la multitud que lo seguía empezaba a disminuir. Alguien le preguntó, “¿Son pocos los que se salvan?” Jesús no le respondió la pregunta. El hombre suena mucho como Rob Bell, imprudente y arrogante. “¿Son pocos los que se salvan?” En vez de contestarle, Cristo se volteó a la multitud y dijo:

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán. Después que el padre de familia se haya levantado y cerrado la puerta, y estando fuera empecéis a llamar a la puerta, diciendo: Señor, Señor, ábrenos, él respondiendo os dirá: No sé de dónde sois... apartaos de mí todos vosotros, hacedores de maldad” (Lucas 13:24-25, 27b).

El Señor Jesucristo, en este pasaje, le habla directamente a uno de los errores en el libro El Amor Gana [Love Wins] de Rob Bell.

Rob Bell dijo: “¿Podría Dios decirle a alguien verdaderamente humillado, quebrantado, y desesperado por una reconciliación, ‘Lo siento, es demasiado tarde’? Muchos se han rehusado a aceptar el escenario en donde alguien está golpeando la puerta, disculpándose, arrepintiéndose [?], y pidiéndole a Dios que le deje entrar, y que Dios le conteste por el ojo de la cerradura: ‘La puerta está cerrada. Lo siento. Si tú hubieras llegado antes, yo hubiera podido hacer algo. Pero ahora, es demasiado tarde’” (traducción de Love Wins, p. 108).

¿Podría Dios decirle eso a alguien? ¡Por supuesto que podría! ¿No es eso exactamente lo que Cristo dijo?

“Después que el padre de familia se haya levantado y cerrado la puerta, y estando fuera empecéis a llamar a la puerta, diciendo: Señor, Señor, ábrenos, él respondiendo os dirá: No sé de dónde sois…apartaos de mí todos vosotros, hacedores de maldad” (Lucas 13:25, 27).

¡Sí, eso es precisamente lo que Dios dirá a aquellos que rechazan a Cristo al fin de sus vidas terrenales! Dios va a “cerrar la puerta” de la salvación a ellos (Lucas 13:25). ¿Y no es eso exactamente lo que Cristo dijo que Dios le iba a hacer a las vírgenes insensatas?

“Y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta. Después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: ¡Señor, señor, ábrenos! Mas él, respondiendo, dijo: De cierto os digo, que no os conozco” (Mateo 25:10-12).

Y también está ese gran ejemplo cuando Dios hace lo mismo en el Antiguo Testamento. “Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37). La Biblia nos dice lo que sucedió después que Noé y su esposa, y sus hijos y sus esposas entraron en el Arca:

“Vinieron, pues, con Noé al arca…y Jehová le cerró la puerta
       (Génesis 7:15, 16).

“Y quedó solamente Noé, y los que con él estaban en el arca”
       (Génesis 7:23).

Dios “le cerró la puerta” después que entró en el Arca. Nadie más pudo entrar porque la puerta del Arca fue cerrada por Dios Mismo.

Dios es el mismo hoy como Él ha sido desde el principio. Nunca debemos aceptar la vieja herejía Gnóstica que el Dios del Antiguo Testamento no es el mismo como el del Nuevo Testamento. ¡No! Él es el Dios eterno. El Apóstol Pedro dijo que Él era el Dios que

“no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos” (II Pedro 2:5).

¡Sólo ocho personas se salvaron, de todas las gentes en la tierra! “Y Jehová le cerró la puerta” (Génesis 7:16). “Y se cerró la puerta" (Mateo 25:10). “Después que el padre de familia se haya levantado y cerrado la puerta” (Lucas 13:25). ¡Cuando Dios cierra la puerta de la salvación, nadie más entra! El libro de Hebreos dice: “Está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio” (Hebreos 9:27). No hay “segunda oportunidad” después de la muerte en este versículo. Abraham le dijo al hombre rico en el Infierno, “Una gran cima está puesta entre nosotros y vosotros, de manera que los que quisieren pasar de aquí a vosotros, no pueden, ni de allá pasar acá, [del Infierno]” (Lucas 16:26). No hay “segunda oportunidad” después de la muerte en ese versículo tampoco.

¿Por qué dice Rob Bell: “El amor de Dios eventualmente va a derretir los corazones más duros...el infierno no es para siempre, y el amor, al final, va a ganar y todos van a ser reconciliados con Dios?” (traducción de Love Wins, pp, 108, 109).

¡Rob Bell dijo eso porque él está equivocado acerca de Dios! Aparentemente él piensa que Dios sólo tiene un atributo – el atributo de la misericordia (amor). Pero el Dios del que se habla en la Sagrada Escritura tiene otro atributo – el atributo de la santidad, que incluye la justicia. El Dr. W. G. T. Shedd dio estos comentarios sobre la justicia de Dios:

      En la religión Cristiana...la justicia retributiva viene continuamente a la vista...pasajes de la Escritura que la presentan son los siguientes: “el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte” (Romanos 1:32); “tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo” (2:9); “en llama de fuego, para dar retribución a los que no conocieron a Dios” (2 Tesalonicenses 1:8); “la justicia no deja vivir” (Hechos 28:4); “Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor” (Romanos 12:19)... “Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas” (Gálatas 3:10); “Porque la paga del pecado es muerte” (Romanos 6:23)... “Sobre los malos hará llover calamidades; Fuego, azufre y viento abrasador” (Salmo 11:6); “mejor te es entrar en la vida cojo o manco que…ser echado en el fuego eterno” (Mateo 18:8); “sufriendo el castigo del fuego eterno” (Judas 7); “Temed a aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno” (Lucas 12:5); etc., etc. (traducción de W. G. T. Shedd, Ph.D., Dogmatic Theology, editores Alan W. Gomes, P and R Publishing, tercera edición, 2003, pp. 295, 301).

El Dr. Martyn Lloyd-Jones dijo:

      Estos maestros modernos no creen en la ira de Dios; dicen que debe ser desterrada. Pero en el Antiguo Testamento esta idea está puesta enfrente de nosotros 580 veces. Que Dios está enojado contra el pecado, que Dios odia el pecado, es una proposición básica (citado en Iain H. Murray, Lloyd-Jones: Messenger of Grace, The Banner of Truth Trust, 2008, p. 209).

Esto también es verdad en el Nuevo Testamento en tales versos como estos:

“¡Serpientes, generación de víboras! ¿Cómo escaparéis de la condenación del infierno?” (Mateo 23:33).

“Donde el gusano de ellos no muere, y el fuego nunca se apaga” (Marcos 9:48).

“Los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder”
       (II Tesalonicenses 1:9).

Ahora, ¿cómo puede un pecador escapar del juicio de Dios? El primer versículo de nuestro texto dice:

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán” (Lucas 13:24).

El Dr. John Gill (1697-1771) dijo que la puerta angosta es Cristo Mismo. Y dijo:

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta”...Esforzarse, es ser diligente en el uso de los recursos, escudriñar las Escrituras con cuidado, atender a la predicación de la Palabra con constancia, no descuidar la oportunidad; orar con seriedad por luz espiritual, conocimiento, y gracia; contender con cada enemigo que se opone a la salvación del alma, como el pecado, Satanás, y el mundo, llevar todos los reproches y persecuciones, y esforzarse a través de todas las dificultades, por el premio... “porque os digo que muchos procurarán entrar y no podrán” – ya sea cuando es demasiado tarde, cuando la puerta se cierra, o cuando antes, muy débilmente, en una manera superficial…de un principio de amor propio, lo que lleva a uno a desear [sólo] felicidad; y por métodos muy indirectos e impropios…por una profesión de religión, y un cumplimiento exterior de las ordenanzas del Evangelio, y no por Cristo, y fe en él (traducción de John Gill, D.D., An Exposition of the New Testament, The Baptist Standard Bearer, 1989 reimpresión, volumen I, p. 626; nota sobre Lucas 13:24).

He estado leyendo la conversión de Spurgeon en su autobiografía. ¡Qué agonía del alma tuvo él durante cinco años, antes de ser convertido a la edad de 15! Estoy tomando algunas de sus palabras, mientras se esforzaba para entrar en Cristo. Él dijo:

Por cinco años, cuando era niño, no había nada delante de mis ojos sino culpa…Día y noche la mano de Dios estaba muy fuerte sobre mi. Tenía hambre por liberación porque mi alma desfallecía dentro de mí. Tenía miedo que los cielos cayeran sobre mí, y aplastaran mi alma culpable. La ley de Dios se había apoderado de mí, mostrándome mis pecados. Si dormía de noche, soñaba del abismo sin fondo, y cuando despertaba, parecía sentir la miseria que había soñado…con lágrimas y gemidos, ofrecí mi oración, sin esperanza ni refugio, porque la ley de Dios me azotaba, y luego me roseaba con [sal las llagas], y yo temblaba con dolor y angustia, y mi alma escogió estrangularse en vez de la vida, porque yo estaba muy triste. Esa miseria fue enviada por esta razón, para que yo llorara por Jesús. Nuestro Padre Celestial no suele llevarnos a buscar al Salvador hasta que nos haya quitado con azotes toda nuestra confianza; Él no nos puede hacer [que anhelemos] el Cielo hasta que nos haya hecho sentir algo de las intolerables torturas de una conciencia adolorida, lo cual es un anticipo del Infierno (traducción de C. H. Spurgeon, Autobiography, Volume I: The Early Years, originalmente compilado por Susannah Spurgeon y Joseph Harrald, The Banner of Truth Trust, 1985 reimpresión, p. 58).

Cómo oro que algunos de ustedes jóvenes no convertidos sean traídos bajo convicción de tu pecado, como lo fue el joven Spurgeon. Entonces sentirás tu necesidad por Jesús tan profundamente que te tirarás sobre Él, y experimentarás una verdadera conversión. Amén. Por favor pónganse de pie y canten himno número 7 en su cancionero, “Nuestro Estado No Regenerado”, por el Dr. Isaac Watts, con la música de “Sublime Gracia”.

Gran Dios de gracia y gloria, Que vergüenza nos da;
Lo vil que nuestra raza es, Y nuestro padre Adán.

Nuestra manchada sangre es de él, Que envenena el ser;
Lo bueno nos hace oponer Y esclavos del pecar.

Rompemos las leyes de Dios, Su gracia al rechazar;
Combatiendo por Satanás Y contra el santo Dios.

Vivimos ajenos de Dios, Y así nos gusta estar;
Corriendo en mal senda vamos Al infierno y pecar.

Alzamos el nombre de Dios, Manda a Su Espíritu
Trae al rebelde pecador, Para amigo hacerlo.

¿Se restablecerá tal ser, Tal ceguedad brillar?
Que al Hijo vea el pecador, Y sienta Su sangre.
   (Traducción libre de “Our Unregenerated Race”
      por Dr. Isaac Watts, 1674-1748; al son de “Sublime Gracia.”)

(FIN DEL SERMÓN)
Puedes leer los sermones de Dr. Hymers cada semana en el Internet
en www.realconversion.com. Oprime “Sermones en Español”.

You may email Dr. Hymers at rlhymersjr@sbcglobal.net, (Click Here)
or you may write to him at P.O. Box 15308, Los Angeles, CA 90015.
Or phone him at (818)352-0452.

La Escritura Leída Antes del Sermón por el Dr. Kreighton L. Chan: Lucas 13:22-29.
El Solo Cantado Antes del Sermón por el Sr. Benjamin Kincaid Griffith:
“What Will You Say Then?” (por Dr. John R. Rice, 1895-1980).


EL BOSQUEJO DE

¿PIENSA ROB BELL QUE
DIOS SOLO TIENE UN ATRIBUTO?

por Dr. R. L. Hymers, Jr.

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán. Después que el padre de familia se haya levantado y cerrado la puerta, y estando fuera empecéis a llamar a la puerta, diciendo: Señor, Señor, ábrenos, él respondiendo os dirá: No sé de dónde sois. Entonces comenzaréis a decir: Delante de ti hemos comido y bebido, y en nuestras plazas enseñaste. Pero os dirá: Os digo que no sé de dónde sois; apartaos de mí todos vosotros, hacedores de maldad” (Lucas 13:24-27).

(Mateo 25:10-12; 24:37; Génesis 7:15, 16, 23; II Pedro 2:5;
Hebreos 9:27; Lucas 16:26; Romanos 1:32; 2:8; II Tesalonicenses 1:8;
Hechos 28:4; Romanos 12:19; Gálatas 3:10; Romanos 6:23;
Salmo 11:6; Mateo 18:8; Judas 7; Luke 12:5; Mateo 23:33;
Marcos 9:48; II Tesalonicenses 1:9)