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LOS DÍAS DE NOÉ – PARTE VI

(SERMÓN #17 DEL LIBRO DE GENESIS)

por Dr. R. L. Hymers, Jr.

Un sermón predicado la Tarde del Sabado, 25 de Agosto de 2007
en el Tabernáculo Bautista de Los Angeles

“Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37).


Otra vez debo decir que la época en que vivimos ahora tiene muchas semejanzas a los días de Noé. Hemos visto dichas semejanzas en los sermones que he predicado sobre este tema:


(1)  Era tiempo de apostasía, cuando la mayoría de gente no era convertida.

(2)  Era un tiempo de mucho viajar, cuando la gente no se quedaba en un solo puesto.

(3)  Era un tiempo cuando multitudes de gente cometían el pecado imperdonable.

(4)  Era un tiempo de matrimonios multiples.

(5)  Era un tiempo cuando las posesiones demoníacas ocurrían a gran escala.

(6)  Era un tiempo cuando los malos pensamientos prevalecían en la tierra.

(7)  Era un tiempo dominado por la música carnal.

(8)  Era un tiempo de gran violencia.

(9)  Era un tiempo cuando se rechazaba la predicación fuerte.


Pero esta noche quiero que veamos otra semejanza. El tiempo de Noé era un tiempo de gran engaño espiritual. Jesús dijo:

“Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37).

Y Cristo le dijo a los Discípulos que nuestro día, cerca al fin de la era, sería un tiempo lleno de gran engaño espiritual.

En Mateo 24:3 los Discípulos preguntaban, “¿Qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo [era]?” (Mateo 24:3). Ellos querían “una señal” del fin. ¡Jesús les dio muchas señales! Él comenzó dandoles esta advertencia:

‘Mirad que nadie os engañe” (Mateo 24:4).

De nuevo, en Mateo 24:24, Jesús dijo:

“Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos. Ya os lo he dicho antes” (Mateo 24:24-25).

Cristo hizo muy claro que ésta era acabaría con gran engaño y fraude espiritual.

¿Como los días de Noé? ¡Claro! ¡El día de Noé estaba lleno de falsedad espiritual, trucos y engaño! Y Jesús dijo:

“Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37).

Hay muchas similitudes entre el engaño espiritual de nuestro día y el tiempo de Noé.

I. Era un tiempo de avivamiento falso.

Voltea a Genesis, capitulo cuatro, verso veintiseis:

“Y a Set también le nació un hijo, y llamó su nombre Enós. Entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre de Jehová” (Genesis 4:26).

La Biblia nos dice que Enós vivió novecientos cinco años.

“Y fueron todos los días de Enós novecientos cinco años; y murió” (Genesis 5:11).

Esto quiere decir que Noé tenía aproximadamente 90 años cuando Enós murió. ¿Por qué es importante esto? Porque demuestra que los hombres invocaban el nombre de Jehová al menos por noventa años de la vida de Noé, y probablemente después. “Entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre de Jehová” (Genesis 4:26).

Pero pese a la actividad religiosa y de “invocar el nombre de Jehová,” los días de Noé estaban llenos de engaño espiritual. El Dr. M. R. DeHaan dijo:

Seguramente los días de Noé antes del diluvio eran días de gran engaño. Pese a la poderosa predicación de Enoc...y de Noé, el mundo no quiso creerle a estos predicadores, y cuando vino el diluvio, solo hubo ocho personas salvas (traducción literal de M. R. DeHaan, M.D., The Days of Noah, Zondervan, 1963, p. 56).

Los hechos que nos presenta la Biblia nos llevan a la conclusión inescapable de que la humanidad estaba espiritualmente engañada a pesar de la predicación de Enoc y de Noé. Aunque oyeron predicación sana, y aunque invocaban el nombre de Jehová, aun estaban engañados y no estaban preparados para el juicio que les llegaría en el Gran Diluvio.

Genesis 4:26 nos dice, “Entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre de Jehová.” Mas, ¿estaban preparados para el juicio? ¡La clara lección de la Biblia es que no estaban preparados! Había mucha actividad religiosa, ¡pero la gran mayoría de la gente se quedó inconversa! No puedo ver cómo podemos llegar a alguna otra conclusión al tomar seriamente y literalmente la cuenta histórica de Genesis, capitulos cuatro a seis. Y Jesús dijo:

“Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37).

La conclusión a que llegamos le molesta mucho a mucha gente. Cuando dí un testimonio ocular del Despertamiento de Brownsville (el “avivamiento de la risa”) hace un tiempo atrás, dos nuevos evangélicos se molestaron tanto que se pusieron de pie en medio de mi sermón y corrieron fuera del servicio, enojados. Pero debo repetir lo que dije entonces. El Despertamiento de Brownsville, o sea, “el avivamiento de la risa,” los servicios de “sanar” en TBN, y muchos otros eventos que se llevan a cabo en el evangelicalismo son falsificaciones del avivamiento verdadero. Hank Hanegraaff ha escrito un libro sobre esto, se llama Counterfeit Revival [Avivamiento Falso] (Word, 1997). El forro de ese libro dice esto:

Los líderes Cristianos que llenan espectro espiritual dicen que ahora mismo estamos en medio del más grande avivamiento en la historia humana. En su apuro a abrazar el gran despertamiento multitudes caen en trampas en una gran apostasía... El Avivamiento Falso documenta el peligro de buscar a Dios en todos los lugares equivocados. Ya que los líderes del Avivamiento Falso usan tácticas de manipulación socio-psicológicas, las personas están atrapadas en una red subjetiva peligrosa. Nadie está inmune a la fuerza de sugestión de masa. Una vez que esta epidemia contamina un movimiento, puede hacer que lo negro parezca blanco, oscurece las realidades y acoge cosas absurdas. En fuerza completa les pega a los intelectuales como a los ignorantes, a los ricos y a los pobres de igual manera. Las religiones paganas y cultos pseudo-Cristianos han sacado ganancias en artificios de manos y de mente para promover sus prácticas. Hoy, los líderes del Avivamiento Falso siguen sus pasos (traducción literal de Hank Hanegraaff, Counterfeit Revival, Word, 1997, forro).

Nuestro día es uno de gran engaño espiritual, lo puedes ver de día o de noche en la televisión en TBN, y está ocurriendo en iglesias a través del mundo. Jesús dijo:

“Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37).

“Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos. Ya os lo he dicho antes” (Mateo 24:24-25).

Los días de Noé se caracterizaban por avivamiento falso, y conversiones falsas, como vemos en Genesis 4:26, cuando “los hombres comenzaron a invocar el nombre de Jehová” sin ser convertidos.

II. Era un tiempo cuando mucha gente tenía falsas esperanzas de salvación.

Yo no puedo llegar a otra conclusión al leer Genesis del capitulo cuatro al seis. El Dr. M. R. DeHaan dijo:

Entonces la advertencia más importante es – ¡que nadie os engañe! Y la pregunta más importante es – “¿estás listo para la venida del Señor?” Recuerda, “como en los días de Noé,” aquellos que descuidaron creer, perecieron para siempre (traducción literal de M. R. DeHaan, M.D., The Days of Noah, Zondervan, 1963, p. 57).

La Biblia dice:

“Dios...no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé...con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos” (II Pedro 2:4-5).

La gente del día de Noé había invocado el nombre de Jehová (Genesis 4:26), pero casi todos se quedaron perdidos. La situación de ellos se describe perfectamente en el tercer capitulo de II Timoteo:

“También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos... que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita” (II Timoteo 3:1, 2, 5).

Y Jesús dijo:

“Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37).

El día de Noé era un tiempo cuando mucha gente tenía falsas esperanzas de salvación. Hay una gran repetición de eso en nuestro día.

La oscuridad creciente de nuestro tiempo desciende sobre nosotros al mismo tiempo cuando las masas de nuestra gente creen estar ya salvas. La Biblia dice:

“Si Jehová de los ejércitos no nos hubiese dejado un resto pequeño, como Sodoma fuéramos, y semejantes a Gomorra” (Isaiah 1:9).

El Dr. Monroe “Monk” Parker a menudo fue llamado “El Decano de los Evangelistas Americanos.” El Dr. Parker dijo:

Si pudieramos conseguir que la mitad de los miembros de iglesia fueran salvos, veríamos un gran avivamiento. De hecho, yo creo que si pudieramos conseguir que la mitad de los predicadores en América fueran convertidos, veríamos un avivamiento poderoso (traducción literal de Monroe Parker, Through Sunshine and Shadows: My First Seventy-Seven Years, Sword of the Lord, 1987, pp. 61-62).

El Editor Dale Burden dijo:

Cualquier persona con madurez y entendimiento espiritual, que conozca el clima religioso de América hoy, sabrá que la mayoría de los miembros de iglesia no son salvos. El Dr. W. A. Criswell, famoso pastor SBC de la inmensa iglesia First Baptist Church en Dallas, le dijo a unos cuantos pastores en la plataforma después de predicar (yo estaba allí) que él se sorprendería de hallar el 25% de sus miembros en el cielo. Bob Gray, pastor de mucho tiempo de la gran iglesia Trinity Baptist Church in Jacksonville, Florida, dijo hace varios años que probablemente el 75% de los que él había bautizado no eran salvos (traducción de Dale Burden, The Gist, Spring, 1977, p. 5).

El Dr. B. R. Lakin solía decir que el setenta y cinco por ciento de aquellos que asisten a iglesias creyentes Bíblicas estaban perdidos. El Dr. A. W. Tozer dijo, “Entre las iglesias evangelicas probablemente no más de uno de cada diez conoce algo por experiencia sobre el nuevo nacimiento” (traducción literal de Paris Reidhead, Getting Evangelicals Saved, Bethany, 1989, p. 46).

¿Qué de tí? ¿Eres tú verdaderamente salvo – o estás colgándote a una esperanza falsa – como las grandes multitudes de gente en el día de Noé, que se ahogaron en el diluvio, y se fueron al Infierno? Aquellas personas tenían falsas esperanzas de salvación. Muchos de ellos seguramente pensaban que serían salvos porque habían orado, invocado el nombre de Jehová (ver Genesis 4:26). Sin embargo grandes cantidades de aquellos que oraron cayeron en el juicio. ¡La oración nunca salvó a nadie! El fariseo oró, pero Cristo nos dijo que estaba perdido.

¿Crees que estás salvo porque crees mentalmente en Dios? Los demonios creen mentalmente en Jesús – y lo dijeron – pero no fueron salvos. No, creer cosas de Jesús y Dios no te salvará. Orar no te salvará. Ir al frente del cuarto, alzar la mano, bautizarte, no te salvarán. Venir a la iglesia no te salvará. Confesar tus pecados no te salvará.

Tenemos toda razón para creer que la gente en el día de Noé hizo todas esas cosas, sin embargo se ahogaron en el Gran Dilvio, y se fueron al Infierno.

“Dios no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé...trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos”
      (II Pedro 2:4-5).

“Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37).

III. Pero, terceramente, era un tiempo cuando algunos eran salvos.

Un pequeño número de gente, Noé y su familia, fueron salvos. En II Pedro 2:5 se nos dice eso, en el verso que acabo de citar. Dice que Dios “guardó [salvó] a Noé.” Sí, la palabra “salvo” [usada en el Inglés] se usa en ese verso. Noé experimentó la salvación, según II Pedro 2:5. En el capitulo once del libro de Hebreos se nos dice que su esposa, sus tres hijos y las esposas de ellos, también fueron salvos. Hebreos, capitulo once, verso siete dice,

“Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase...” (Hebreos 11:7).

Literalmente eso significa “que su casa se salvase,” o su familia. Su esposa y cada miembro de su familia tenía que ser verdaderamente salvo para escapar “el diluvio [que vino] sobre el mundo de los impíos” (II Pedro 2:5).

La unica manera que Noé y su familia escaparon del juicio de Dios fue por ser verdaderamente convertidos. Ellos en realidad experimentaron la conversión. ¿Qué de ti?

¿Cómo fueron salvos ellos? En Hebreos 11:7 se nos dice que fue “por fe.” Tú tienes que creen en el Señor Jesucristo totalmente y completamente (ver Hechos 16:31). Pero antes de creer en Jesús de un modo que salva, tienes que llegar a un sentido de pecado e incapacidad. Eso te prepara para deseas a Cristo.

Ahora, casi todos en el día de Noé te hubieran dicho que tenían fe. Después de todo, invocaban el nombre de Jehová, oraban (Genesis 4:26). Te hubieran dicho que tenían fe. Pero no tenían fe verdadera que salva en Cristo. ¿Cómo lo sabemos? Voltea a Genesis, capitulo siete, verso uno.

“Dijo luego Jehová a Noé: Entra tú y toda tu casa en el arca; porque a ti he visto justo delante de mí en esta generación” (Genesis 7:1).

Dios dijo, “A ti he visto justo.” Eso es justicia imputada. Noé fue “visto justo” por Dios por su fe en Jesús. Noé tenía fe en el Cristo preencarnado. Dios declaró que Noé era justo ya que tenía fe en Jesús. Romanos 4:5 dice:

“Mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia” (Romanos 4:5).

Cuando confías completamente en Jesucristo, Dios te cuenta como una persona justa, por medio de la justicia de Cristo imputada.

Noé no fue salvo por ser bueno. ¡No! ¡No! ¡No! Dios dijo:

“A ti he visto justo” (Genesis 7:1).

Dios lo vio justo porque él tenía fe en Jesús (ver Hebreos 11:7). “¡Por fe!” “¡Por fe!” “¡Por fe!” Hebreos 11:7 nos dice que ¡Noé fue salvo por fe! Dios lo vio justo porque él tenía en el Hijo de Dios preencarnado.

Y Noé y su familia entraron al arca porque la fe de ellos los hizo obedecer a Dios. Dios le dijo a Noé, “Entra tú y toda tu casa en el arca” (Genesis 7:1). Eso es un retrato de venir a Jesucristo. Jesús dijo:

“Venid a mí...y yo os haré descansar” (Mateo 11:28).

Eso es lo que quiero que hagas. Quiero que vengas a Jesucristo, tal como Noé entró en el arca. Cristo murió en la Cruz para pagar por tus pecados. Cristo derramó Su Sangre para lavar tus pecados. Pero Cristo ascendió de vuelta al Cielo después de haber resucitado de los muertos. Pero tú no lo harás hasta que estés cargado y quebrantado por un profundo sentido de pecado, pecado que te corta de Dios, pecado que condenará tu alma al Infierno para siempre. Tú tienes que recibir un agonizante sentido cortante de pecado o no entrarás al arca de Cristo.

Entonces, debes venir directamente a Cristo. Tal como Noé vino directamente adentro del arca, tú tienes que venir directamente dentro de Cristo. Yo oro que lo hagas. Serás destruido en el juicio venidero a menos que lo hagas.

“Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37).

(FIN DEL SERMÓN)
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La Escritura Leída por Dr. Kreighton L. Chan Antes del Sermón: Genesis 6:5-13.
El Solo Cantado por el Sr. Benjamin Kincaid Griffith Antes del Sermón:
“What If It Were Today?” (por Lelia N. Morris, 1862-1929).


EL BOSQUEJO DE

LOS DÍAS DE NOÉ – PARTE VI

(SERMÓN #17 DEL LIBRO DE GENESIS)

por Dr. R. L. Hymers, Jr.

“Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:37).

(Mateo 24:3-4, 24-25)

I.   Era un tiempo de avivamiento falso, Genesis 4:26; 5:11.

II.  Era un tiempo cuando mucha gente tenía falsas esperanzas
de salvación, II Pedro 2:4-5; II Timoteo 3:1, 2, 5;
Isaías 1:9.

III. Era un tiempo cuando algunos eran salvos, Hebreos 11:7;
II Pedro 2:5; Hechos 16:31; Genesis 7:1; Romanos 4:5;
Mateo 11:28.